ICDE World Conf 2015 #2 | Sobre acceso a Educación y oportunidad en el mercado

14 de octubre de 2015. Parece que nos centramos en el acceso. La mitad de los ponentes ha resaltado la necesidad, más bien el requerimiento moral, de un acceso universal a educación abierta, gratuita y de calidad, para mejorar la condición social de los más desfavorecidos. La otra mitad de los ponentes ha asentido. No es que esté en contra, pero sí comento algún matiz. ¿Y qué ocurre después del acceso?

Imaginemos que cualquiera puede estudiar lo que quiera cuando quiera, con un acceso fantástico, y gratis (o casi). Imaginemos que finaliza sus estudios satisfactoriamente. ¿Qué ocurre después? O encuentra trabajo sobre la profesión que ha estado estudiando, o trabajará en algo que no tiene nada que ver, o no trabajará porque el mercado no lo absorbe, y así tendremos una capa de parados tan grande como ahora, pero bien formados. ¿Qué es el acceso sin la oportunidad de inserción laboral?

Emprendimiento y precariedad

Y no me refiero al auto-emprendimiento, sobre el que ya me he mostrado crítico en este mismo foro. Uno es auto-emprendedor si lo vive y quiere desde dentro. Si no tiene el espíritu, o la intención, o las competencias, o una mezcla de todo, y se ve forzado a buscar una oportunidad por sí mismo, porque no encuentra quien le contrate, no creo que pueda llamarse emprendimiento, sino supervivencia.

¿Qué es el acceso sin la oportunidad de inserción laboral?

Ser autónomo, freelance, buscarse la vida. Es decir, lo que hemos hecho toda la vida, antes de esta crisis, y después de la anterior. No creo que debamos enmascarar la precariedad laboral, las prejubilaciones y la falta de hueco en el mercado para los jóvenes, con un barniz de empuje moral que enmascara una política económica que nos deja una gran parte de la población sin trabajo y sin oportunidad. No necesitamos maquillar precariedad con emprendimiento.

La necesidad de una mirada completa

El acceso es clave, sin duda. Pero solo, aislado, no sirve de mucho. Debe existir una cadena, desde el análisis de las competencias necesarias para el desarrollo del mercado donde posteriormente será insertado el estudiante, hasta la oportunidad articulada para que ocurra esa inserción, pasando por la adecuación de las competencias del sistema educativo a la realidad que la Sociedad requiere, ahora y en un futuro a medio plazo, para ser realistas. Hablar de acceso es bien intencionado, pero parcial. Debemos integrar todas las fases, como compartimentos interrelacionados, que no operan de forma aislada, sino hacia un objetivo consensuado.

Daniel Burgos